Cuantas veces se nos ha dado por mirar mas de lo que debemos ver, hemos esculcado donde nos dijeron que no veamos, cuantas veces hemos sido cómplices de algún delito sin hacernos presente o mejor aun cuantas maneras de espiar tenemos las mujeres.
Responder a cada una de ellas es cuestión de minutos y de cada una, por lo general quien no ha sido testigo de un delito, quien vio y calló, que clase de mujer es aquella que sabe que la pareja de su mejor amiga le esta siendo infiel pero sin embargo no es capaz de hablar, quien es aquella persona que es un simple espectador que por no involucrarse a una definición hace de ella una simple observación .
Muchas preguntas nos podemos hacer respecto a cuanto podemos ver, pero sin embargo que tanto debemos decir, si espiamos las mujeres, no es cuestión de desconfianza, no solo espiamos a nuestra pareja, espiamos a nuestras amigas, a nuestras enemigas (para quien tiene el gusto de tenerlas) y sobre todo a las parejas de ellas, porque al menor error la vista hace de ese observar un acto de placer.
Responder a cada una de ellas es cuestión de minutos y de cada una, por lo general quien no ha sido testigo de un delito, quien vio y calló, que clase de mujer es aquella que sabe que la pareja de su mejor amiga le esta siendo infiel pero sin embargo no es capaz de hablar, quien es aquella persona que es un simple espectador que por no involucrarse a una definición hace de ella una simple observación .
Muchas preguntas nos podemos hacer respecto a cuanto podemos ver, pero sin embargo que tanto debemos decir, si espiamos las mujeres, no es cuestión de desconfianza, no solo espiamos a nuestra pareja, espiamos a nuestras amigas, a nuestras enemigas (para quien tiene el gusto de tenerlas) y sobre todo a las parejas de ellas, porque al menor error la vista hace de ese observar un acto de placer.
vouyerismo.
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